"El timonel reconoció que existió pasividad ante Santos, mismo que significó la derrota"
Hablaba lento, estaba desanimado, triste. Enrique Meza, entrenador del Cruz Azul, aceptaba la inoperancia celeste con cierta incredulidad. Nadie se fue satisfecho ante paupérrima actuación.
"La gente vino, apoyó, abucheó, pero los jugadores lo están sufriendo. ¿Quién va a estar contento?", se cuestionó.
Meza reconoce que existió pasividad y tibieza en la exhibicion cementera. Lo de hoy fue un retroceso, según el timonel.
"Fue una actuación desangelada, no sólo porque perdimos, nunca hicimos alguna combinación que diera la idea de que estamos mejorando, se dio un paso para atrás", sentenció.
Don Enrique admite falta de vehemencia. No había nadie que gritara y ordenara en el campo; incluso Gerardo Torrado salió de cambio. Reflejo pleno de lo sucedido.
"Intensidad es lo que quisiéramos, es lo que estamos buscando. No todo es eso, la gente pide bravura, agresividad, pero el equipo no la esta dando", mencionó.
El técnico celeste encuentra cierta desorientación en sus pupilos. "Corren mucho, pero estamos corriendo más. No tenemos el manejo del juego", afirmó, mientras reafirmó su insatiafacción, después de que Santos los cazó un par de veces. "Casi no me gustó nada"
De cara al partido ante el América, el 'Ojitos' encuentra la motivación."Vamos a ver de que estamos hechos", dijo, al tiempo que descartó que exista alguna charla especial con el grupo.
"Tenemos una buena comunicación , el equipo trabaja, pero no está jugando bien, vamos contra alguien de mucha jerarquia. El partido de Santos esta ahí para la historia", expresó.
"Tras la derrota en su propio estadio ante Santos, la afición celeste abucheó a su equipo al final del partido"
La situación de Cruz Azul comienza a ser crítica. Los resultados no se le dan al equipo y la afición que hasta hace un mes vivía un idilio con los jugadores, ahora se les han volteado para abuchearlos dentro y fuera de la cancha. Christian Giménez fue uno de los elementos celestes que peor despedida tuvieron del Estadio Azul, aunque asegura que la rechifla de la gente le sirve para sacar adelante el momento que atraviesa.
"Los abucheos no me molestan, al contrario, me dan fuerza, me motivan, porque hasta de estas derrotas podemos sacar algo positivo y es lo que tenemos que hacer. Yo nunca bajo los brazos", señaló el 'Chaco', quien agregó que la directiva se acercó con ellos al final del duelo ante Santos para reiterarles su apoyo a pesar del incierto arranque han tenido en el torneo.
"Los más preocupados somos nosotros. Ellos (la directiva) obviamente exigen resultados, pero mantienen su apoyo sobre nosotros. Repito, tenemos que aprender de estos partidos para no cometer los mismos errores", indicó.
Por su parte, Jaime Lozano reconoció que las cosas marchan lejos de lo esperado y se mostró preocupado tomando en cuenta que el próximo duelo de La Máquina será ante su némesis, el América.
"Por supuesto que no es la mejor forma para llegar a ese partido, sabemos que no les ganamos hace tiempo y hay presión. No hemos jugado bien, pero nos ha alcanzado para generar seis o siete jugadas de gol que no supimos concretar. Tenemos que seguir trabajando y esforzándonos para sacar esto adelante", manifestó.
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