miércoles, 3 de febrero de 2010

"Necesitan una limpia": David Faitelson Blog

 
"Fuera y dentro de la cancha el América prolonga su mala racha; ¿Será tiempo de recuperar sus valores?"
El América necesita de algún tipo de ayuda divina, de alguna clase de fuerza extraordinaria que lo limpie, lo exima, lo aleje de una vez y para siempre de los hechizos, perjurios y embrujos que le han acompañado en la última época. 

Michael Bauer habla de las crisis
En tan sólo algunos días del nuevo año y nueva década, un jugador yace en terapia intensiva recuperándose milagrosamente de un balazo en la cabeza y otro más se salvó por apenas algunos centímetros luego de que intentaron asaltarlo. A esos hechos habrá que unir algunos otros acontecimientos tanto fuera como dentro de la cancha que han aquejado al americanismo: desde un asalto al presidente del equipo hasta un comando que irrumpió en los campos de Coapa para atrapar de aquel equipo de Mapaches de Nueva Italia a algunos "distinguidos" miembros del narcotráfico y del crimen organizado en México.
Suelo respetar cualquier tipo de creencia. Mi padre, sabiamente, solía decirme: "Cree en todo lo que no puedas explicar". En el América pasa algo. Hay algo grave, profundo, oculto, siniestro, que ha lastimado su esencia deportiva y que hoy le tiene en el abandono, en la tristeza y en la apatía. Cuando no lo hieren o lo asaltan en la cancha, lo hacen en la calle o en el bar. Michel Bauer ha demostrado en cada crisis que es un hombre de capacidad y de respeto. Él mismo tiene que valorar que el club ha perdido imagen, fuerza y respeto por sus raíces gracias a la irrupción de extraños en la última época. No toda la culpa es suya. Habría que preguntarles a Javier Pérez Teuffer y a Guillermo Cañedo porque permitieron que personajes de distinta creencia y linaje y hasta clase social se hayan apoderado del club y hayan tirado por la borda el trabajo y el sacrificio de sus antecesores. El América necesita recuperar lo más sagrado y perpetuo que tiene: sus raíces, su sangre, su casta, su raza... No tengo nada contra Pável Pardo, me parece un tipo inteligente y excepcional, pero resulta que el capitán y aparente líder del vestidor es un jugador no nacido en la cuna americanista. No tengo nada contra Chucho Ramírez. Respeto y admiro el título que consiguió al frente de la selección Sub 17 en el 2005, pero está claro que no nació en la cuna americanista, que no piensa, no come, no sueña, no ríe, no respira, no ama, no odia, no vive como americanista. Estimado y respetado señor Bauer: es tiempo de recuperar los valores, la esencia, la sangre de este club. El líder de la cancha y el líder de la banca tienen que volver a pertenecer a los verdes, amarillos, fértiles, asoleados y sagrados campos de Coapa.

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